Hoy vamos a hablar de los betacarotenos. ¿Los conoces? ¿Te suenan?
Seguramente habrás oído alguna vez que si comes una zanahoria diaria te ayudarán a ponerte más morena.
Esto es gracias a los betacarotenos. Un antioxidante natural presente en los alimentos, principalmente frutas y verduras de color anaranjado o amarillo.
Son los responsables de darle ese tono a los alimentos de éste tipo. Aunque curiosamente, también están presentes en los de color verde o rojo.
Los betacarotenos son los precursores de la vitamina A. Es decir, cuando los ingieres a través de los alimentos y se asimilan en el organismo, pasan a convertirse en vitamina A en el Intestino Delgado.
La vitamina A es esencial para mantener sanas las membranas y mucosas de la piel.
Ayuda a broncear la piel desde el interior, ya que estimula la producción de melanina, que es el pigmento responsable del color de la piel, así como de los ojos y del cabello.
La melanina nos protege también de los rayos ultravioletas.
Cuanta más melanina tengas, más morena será tu piel y serás menos propensa de padecer quemaduras solares.
Alimentos ricos en Betacarotenos
Los alimentos ricos en betacarotenos son las ya conocidas zanahorias, la calabaza, los pimientos tanto rojos como amarillos y los boniatos.
No te dejes confundir por el color verde de algunas verduras como espinacas, el brócoli, la col kale, las acelgas, rúcula… la riqueza en clorofila camufla el color amarillo que les aportarían los betacarotenos.
Dentro de las frutas destacamos los albaricoques, los mangos, los melocotones, nectarinas, caquis, las papayas, naranjas, plátanos o ciruelas principalmente.
¿Qué aportan a nuestro organismo?
Incorporar esta variedad de alimentos en tu rutina diaria de comidas te beneficiará en más de un aspecto.
Te ayudará a broncear y proteger tu piel. Además, los betacarotenos están asociados también con la prevención de ataques cardíacos, cáncer y enfermedades cardiovasculares.
Fortalecen el sistema inmunitario y ayudan a eliminar los radicales libres del organismo.
Puedes tomarlos tanto crudos como cocinados ya que no pierden sus propiedades con el cocinado, así que será una decisión personal y al gusto.
Para potenciar su acción estaría bien que los consumieras con grasas saludables incluyendo por ejemplo semillas de lino, aceite de oliva, aguacates…
Los puedes encontrar en cápsulas o comprimidos como suplementos nutricionales.
La única pega es que debes empezar a consumirlos unos 2 meses antes a la exposición solar. Dato que hay que tener en cuenta si el objetivo principal es que te ayude para el bronceado.
Además de incluir éstos alimentos en tu dieta, no debes olvidarte de otros antioxidantes como son la vitamina C, la vitamina E, los omegas 3 y 6, el selenio, licopeno, así como una buena hidratación diaria.
La piel es el órgano más amplio de todo el cuerpo. Además de hacer su trabajo, muchas veces intenta hacer el de los demás eliminando residuos o sustancias tóxicas que deberían ser eliminados por otros sistemas.
Todos éstos alimentos antioxidantes te ayudarán a mantener la elasticidad de la piel, prevenir en la formación de manchas en la piel así como también lo hará con la aparición de arrugas.
En definitiva, previenen la oxidación celular y luchan contra el envejecimiento prematuro con la eliminación de radicales libres.
No debes olvidar…
No debes olvidarte de una buena exfoliación de la piel, una buena protección solar con el factor adecuado y terminar con una adecuada hidratación.
Evita la exposición al sol en las horas de mayor riesgo.
Así que ya sabes, toma nota para lucir un bonito tono solar al igual que una piel sana e hidratada.
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